Redacción / La Voz de Michoacán Ciudad de México. Narda, una tormenta tropical que se formó en el océano Pacífico, evolucionó a huracán categoría 1 en la escala Saffir-Simpson, por lo que sus bandas nubosas mantendrán, en las próximas horas, lluvias muy fuertes a intensas en el oeste de México, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN). A las 15:00 horas, tiempo del centro de México, el centro del sistema se localizó a 580 kilómetros (km) al suroeste de Playa Pérula, Jalisco, y a 590 km al suroeste de Manzanillo, Colima, con vientos máximos sostenidos de 140 kilómetros por hora (km/h), rachas de 170 km/h y desplazamiento hacia el oeste a 20 km/h. Según el reporte, los desprendimiento nubosos de Narda provocarán lluvias muy fuertes (de 50 a 75 milímetros [mm]) en Jalisco, Colima y Michoacán, así como rachas de viento de 40 a 60 km/h y oleaje de 2,5 a 3,5 metros de altura en las costas de esos estados. El organismo explicó que las lluvias podrían acompañarse de descargas eléctricas y granizo, así como generar encharcamientos, deslaves e inundaciones en zonas bajas de los estados mencionados. “Asimismo, los vientos previstos podrían derribar árboles y anuncios publicitarios, por lo que se exhorta a la población a atender los avisos del Servicio Meteorológico Nacional, de la Comisión Nacional del Agua, seguir las recomendaciones de Protección Civil, y extremar precauciones ante el viento y oleaje elevado”, apuntó. Los modelos de pronóstico indican que, en los siguientes días, Narda continuará alejándose del territorio mexicano y sus efectos disminuirán gradualmente. México prevé hasta 20 ciclones con nombre en el Pacífico mexicano durante la actual temporada, de los cuales entre cuatro y seis podrían alcanzar las categorías 3, 4 o incluso 5. Hasta ahora se han formado 12 tormentas en el Pacífico mexicano: Alvin, Bárbara, Cosme, Dalila, Erick, Flossie, Gil, Henriette, Ivo, Juliette, Lorena y Kiko. El último huracán registrado en el país fue Erick, que tocó tierra en el sur de México el pasado 19 de junio como huracán categoría 3 y causó daños principalmente en Oaxaca y Guerrero, dejando la muerte de un menor y diversas afectaciones en la infraestructura eléctrica, viviendas y la caída de árboles.